Quisiera ser como las teclas de un piano improvisando melodías
Y al compás de éstas, anticipar con sueños la madrugada
Pero no puedo
Porque he de avanzar por los taludes del mundo hasta hallar hospedaje en lo más alto
Y demorar mis pasos
En el intento de detenerme un largo instante
Un infinito, quizá, abstraído
¿Dónde quedan suspendidos mis anhelos de dulces y risas?
¿En qué lugar recóndito de mi universo extravié todas aquellas promesas?
Ya no las hallo
Porque son como el humo que se eleva y dispersa
Metamorfosis de vapor desfigurado
Ausencias
Las ventoleras de hielo que agrietan ahora mis manos descuidadas
Van susurrando recados a este corazón en ruinas.